Tesla ha sido objeto de escrutinio debido a su software de conducción autónoma.
El 18 de octubre de 2024, la NHTSA lanzó una investigación sobre 2,4 millones de vehículos Tesla equipados con el sistema Full Self-Driving (FSD) debido a cuatro accidentes, uno de los cuales fue mortal, que ocurrieron en condiciones de baja visibilidad.
El regulador examinará qué tan efectivamente responde el FSD a situaciones de baja visibilidad y si las actualizaciones del sistema han sido lo suficientemente significativas como para mejorar su rendimiento. La investigación abarca los modelos S, X, 3, Y y Cybertruck de los años 2016 a 2024.
Los expertos creen que las condiciones climáticas pueden afectar el rendimiento de las cámaras y esperan un análisis exhaustivo por parte de los reguladores.
Tesla previamente señaló que el FSD requiere la participación activa del conductor y no convierte al vehículo en completamente autónomo.